A “La voz del viento”
La Voz Del Viento podría ser una sola tarde dorada, o un terrino
escalón, o diez docenas de huevos frescos, o un descosido en la mejilla de lo
atónito, pero, ante todo y sin duda, es la simiente que levita sobre nuestro
pecho cuando este descansa, fatigado, de lo comúnmente desastroso.
Alimentos que nutren una pantalla son sencillez para cercenar la
inhalación del espíritu humano, un humano urbanita y descompensado. En la Voz
Del Viento se reconoce el progreso como involución invitándonos con su sublime
fotografía y su hermosa musicalidad a retornar a la semilla, a la primigenia
raíz de la armonía, de lo cabal, del equilibrio.
En esta película/documental confluye el saber de los pueblos del
Mediterráneo, la razón de quien sabe escuchar la tierra y la necesidad de
hacerlo. Mientras la codicia y el desenfreno sean norma en los parámetros del
entendimiento (un entendimiento tan desconocedor y vacío como nuestro)
Mientras esto suceda durante cada mañana, hasta la puesta del sol y
hasta que los dedos de la madrugada toquen el alba (todo el día y cada día)
nuestra deuda, la deuda de cada uno, no será purgable.
La Voz Del Viento nos insta a reconocer las semillas como lo que son:
vida, metamorfosis, germinación, albergues sempiternos del renacer. Un renacer
quizá ahora más necesario que nunca.
Carlos Javier Castro Ruz
Con motivo de la Campaña Pobreza Cero, la CONGRA (Coordinadora granadina de ONGDs a la que pertenece FISC) proyectó el documental "La Voz del Viento". El éxito fue rotundo, ya que era la primera vez que se organizaba un vídeo-forum con motivo de esta Campaña, y nuestros objetivos se cumplieron.
El artículo hace referencia al documental, unas preciosas líneas para que quién no lo haya podido disfrutar, haga un hueco en la apretada agenda diaria y contemple esta maravilla. Gracias Carlos!!
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